10 ago 2009

Leyenda: sobres redondos.

Dicen que hace mucho tiempo, como parte de la bienvenida se le asignaba una tarea muy importante al empleado bancario ingresante. La misma consistía en cumplir el siguiente encargo: debía ir a la librería a comprar “sobres redondos para circulares de BCRA”.

De más está decir que no existen tales sobres. Sin embargo, el dueño del local, ya acostumbrado a recibir a los obedientes nuevos empleados del Banco, formaba parte de la parodia. Así, la respuesta era siempre la misma: “acabo de vender el último, pero la semana que viene volvé porque seguro recibo el pedido de sobres”.
Finalmente, al poco tiempo la verdad era revelada y, generalmente, el ingresante sorprendido se enojaba con el señor del comercio (cómplice de la broma).